
Cantoira es un pueblo tranquilo y pacífico de unos 3000 habitantes en la provincia de Pontevedra. Una ciudad donde prácticamente todos los vecinos se conocen y están unidos.
Un ladrón decidido a robar en el pueblo, aprovechó que una vecina, con la confianza y tranquilidad que reina en el pueblo, le dejó las llaves del auto mientras bajaba a comprar tabaco.
Pero la facilidad con la que cometió el crimen se volvió en su contra, los vecinos alarmados por el hecho, arrinconaron al ladrón en su desesperada huida.
No debería haber conocido la ciudad, porque entró en un callejón sin salida y decenas de vecinos le habían tendido una emboscada al criminal, lo habían atrincherado.
Tuvo que dejar el coche robado y huir a pie, un vecino lo interceptó y lo retuvo hasta la llegada de la Guardia Civil. Intervino un cuchillo.
Fiestas de Cantoira
Lo que, suponemos, no sabía el ladrón es que el primer domingo de agosto los habitantes de Catoira protagonizan las invasiones vikingas que sufrieron hace mil años con un espectáculo singular.
Es un verdadero espectáculo, un festival folclórico en el que los aldeanos se disfrazan de feroces guerreros vikingos y se apoderan de la ciudad.
Antena tres noticias ha ampliado la información y ofrece vídeos:
https://www.antena3.com/noticias/sociedad/vecinos-catoira-frenan-barricada-ladron-coche-video_201905155cdc261f0cf2535c40dc3b17.html
